La alcaldesa de Órgiva, junto al
alcalde de Soportújar y el diputado provincial del PSOE, Manuel
Megías, ha denunciado que “ello provocaría la despoblación y el
envejecimiento de los pueblos”
La alcaldesa de Órgiva, María Ángeles
Blanco, junto al diputado provincial socialista, Manuel Megías, y el
alcalde de Soportújar, José Antonio Martín, se han acercado este
mediodía hasta los juzgados de Órgiva para informar de la
incidencia que tendrá en la comarca de la Alpujarra la reciente
aprobación por parte del CGPJ de crear un nuevo modelo de
demarcaciones judiciales y que implicaría en el sur de la provincia
que Motril acogiera en un único partido a Almuñécar y Órgiva.
La edil orgiveña ha señalado que “no
entendemos cómo un servicio que se viene prestando desde hace tanto
tiempo nos los quieran suprimir. En lugar de acercar los servicios
nos los pretenden alejar, lo que supondría no sólo un gasto
económico sino que también hace que los pueblos pequeños que
vivimos del sector servicios se vayan despoblando y se envejezcan”.
Asimismo ha añadido que “no estamos de acurdo, el gobierno debería
replantearse esta medida, aquí en Órgiva contamos con el proyecto
del nuevo Palacio de Justicia acabado y con los terrenos cedidos y no
sabemos lo que va a ocurrir. Por lo que rechazamos rotundamente que
quieran desmembrar los territorios”
Por su parte, el diputado socialista ha
señalado que “el caso de Órgiva es de los más significativos ya
que está ubicado en uno de los territorios que se verían más
perjudicados. Esta zona cuenta con unas difíciles comunicaciones y
tal y como está programado este decreto, el tener que desplazarse
hasta Motril incluso haría que muchísimos ciudadanos no pudiesen
cumplir el espíritu de la modificación en la que todos los
habitantes estuviesen a menos de una hora ya que hay localidades que
se encuentran más alejadas, lo que supondría un grave perjuicio”.
Y por otro lado, el alcalde de
Soportújar, José Antonio Martín, ha asegurado que “estas medidas
van justamente en la dirección contraria, si suprimimos estos
servicios agravaremos el problema de la saturación de los juzgados.
En la Alpujarra hoy por hoy las distancias son importantes entre los
pueblos y si alejamos los juzgados pondremos más dificultades a la
gente, además de la supresión de puestos de trabajo que ello
conllevaría”.